Alguna vez quise recoger las hojas
que dejó nuestro otoño verdugo
en este camino entumido…
Mas aprendí que la ira es tenaz
y puede sobre el amor idiota…
Imposible es vivir sin agua…
Posible es el perdón y el olvido…
Ahora caliento la garganta…
El recuerdo…
…dulce flor de centeno…
El futuro…
…duro y ciego amanecer…
No importó cuanto traté esta noche…
Al final de la velada…
…nunca me pude perder…
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